La segunda línea

Lleva más de cincuenta años trabajando la arenosa tierra de El Perellonet. En sus invernaderos se producen tomates, calabacines y cebollas. Él no le da mayor importancia, pero en esta crisis sanitaria, la producción local nos ha permitido seguir comiendo productos de calidad sin ningún problema de abastecimiento. “A nivel personal, yo creo que no me va a cambiar mucho, porque por la faena que tenemos nosotros, al fin y al cabo, casi no hemos parado”. Pepe.

Lleva más de cincuenta años trabajando la arenosa tierra de El Perellonet. En sus invernaderos se producen tomates, calabacines y cebollas. Él no le da mayor importancia, pero en esta crisis sanitaria, la producción local nos ha permitido seguir comiendo productos de calidad sin ningún problema de abastecimiento. “A nivel personal, yo creo que no me va a cambiar mucho, porque por la faena que tenemos nosotros, al fin y al cabo, casi no hemos parado”. Pepe.

Toni lleva la linea 16 de la EMT en Valencia, y desde el inicio del estado de alarma no ha dejado de trabajar a pesar de una bajada de pasajeros del 90 %. “Evidentemente nuestro modo de funcionar, a pesar de todo, creo que sí que va a cambiar de ahora en adelante”. Toni Cotanda.

Toni lleva la linea 16 de la EMT en Valencia, y desde el inicio del estado de alarma no ha dejado de trabajar a pesar de una bajada de pasajeros del 90 %. “Evidentemente nuestro modo de funcionar, a pesar de todo, creo que sí que va a cambiar de ahora en adelante”. Toni Cotanda.

Rosa despacha en un horno que no cerró durante el estado de alarma. Ante ella se presentan personas de toda índole, con diferentes niveles de protección, lo que agudiza todavía más la incertidumbre y el miedo al contagio. “Personalmente, sigo muy agobiada. Tengo mucho miedo a encontrarme y relacionarme con la gente, y no creo que la sociedad haya aprendido absolutamente nada”. Rosa.

Rosa despacha en un horno que no cerró durante el estado de alarma. Ante ella se presentan personas de toda índole, con diferentes niveles de protección, lo que agudiza todavía más la incertidumbre y el miedo al contagio. “Personalmente, sigo muy agobiada. Tengo mucho miedo a encontrarme y relacionarme con la gente, y no creo que la sociedad haya aprendido absolutamente nada”. Rosa.

Encarna ha estado toda la cuarentena limpiando comunidades. Lo ha hecho a pesar de tener a su hija recién operada de cancer de mama y con el miedo lógico a contraer la COVID-19 y contagiarla. “Se que esto va a ser difícil, porque veo mucha gente que es irresponsable. La veo cada día”. Encarna Aragón.

Encarna ha estado toda la cuarentena limpiando comunidades. Lo ha hecho a pesar de tener a su hija recién operada de cancer de mama y con el miedo lógico a contraer la COVID-19 y contagiarla. “Se que esto va a ser difícil, porque veo mucha gente que es irresponsable. La veo cada día”. Encarna Aragón.

Andrés es Venezolano y lleva tres años en España con visado de asilo. Como repartidor autónomo, el confinamiento no ha mermado su trabajo sino todo lo contrario. Los repartos de supermercado han aumentado considerablemente en plataformas cómo Amazon Prime Now. “Sigues trabajando porque te da miedo lo que va a pasar, siguen los gastos, el cobro del autónomo mensual y no sabes cuánto tiempo va a durar esto”. Andrés.

Andrés es Venezolano y lleva tres años en España con visado de asilo. Como repartidor autónomo, el confinamiento no ha mermado su trabajo sino todo lo contrario. Los repartos de supermercado han aumentado considerablemente en plataformas cómo Amazon Prime Now. “Sigues trabajando porque te da miedo lo que va a pasar, siguen los gastos, el cobro del autónomo mensual y no sabes cuánto tiempo va a durar esto”. Andrés.

María ha pasado el confinamiento atendiendo a pequeños animales en su clínica veterinaria de Sedaví, Valencia. Su labor está considerada actividad esencial, ya que preservar la salud de los animales es también preservar la salud de las personas. «A nivel profesional ha sido duro. Somos actividad esencial y no hemos parado, y era una incertidumbre la de estar aquí trabajando mientras tu familia estaba en casa». María Vitoria.

María ha pasado el confinamiento atendiendo a pequeños animales en su clínica veterinaria de Sedaví, Valencia. Su labor está considerada actividad esencial, ya que preservar la salud de los animales es también preservar la salud de las personas. «A nivel profesional ha sido duro. Somos actividad esencial y no hemos parado, y era una incertidumbre la de estar aquí trabajando mientras tu familia estaba en casa». María Vitoria.

Manuel no parece preocupado por la incidencia de la COVID-19 en su trabajo de pescador. Su oficio es, sin duda, de primera necesidad, pero la profesión sigue siendo solitaria, por lo que las medidas de seguridad, aunque presentes, se quedan quizás en un segundo plano. «El estilo de la vida de la gente yo creo que sí que va a cambiar. Nosotros, que somos muy de abrazos y besos, lo vamos a notar mucho». Manuel.

Manuel no parece preocupado por la incidencia de la COVID-19 en su trabajo de pescador. Su oficio es, sin duda, de primera necesidad, pero la profesión sigue siendo solitaria, por lo que las medidas de seguridad, aunque presentes, se quedan quizás en un segundo plano. «El estilo de la vida de la gente yo creo que sí que va a cambiar. Nosotros, que somos muy de abrazos y besos, lo vamos a notar mucho». Manuel.