Albacete, Albacete
20 Junio 2020
Miseria en "escalada"
El confinamiento en los asentamientos irregulares que se encuentran en las afueras de Albacete, integrados mayoritariamente por subsaharianos y rumanos, impidió a estas personas buscarse la vida. No poder salir a pedir limosna, a recoger chatarra o a trabajar en el campo les dejó sin el poco dinero que conseguían ingresar día a día, pero que les permitía sobrevivir. En lugares como este, la labor de asociaciones como el Colectivo de Apoyo al Inmigrante (Acaim) se hacía más necesaria que nunca. Cada semana repartían alimentos entre los residentes de estos campamentos y el aumento de la demanda les dejó literalmente sin existencias. Tanto, que Acaim se vio obligada a hacer llamamientos a través de redes sociales para que se hicieran donaciones y poder comprar alimentos de primera necesidad, con los que cubrir los desayunos y las cenas de estas personas. “Ha sido sorprendente la oleada de solidaridad y donaciones que hemos tenido”, explicaba Eva Sánchez, de Acaim.
Una madre y su hijo esperan la llegada de alimentos de primera necesidad.